Largamos con la serie de publicaciones con el relato de mi hermana, la del nombre raro y su familia. Gonza, su marido y “mi cuñado”, es lo que me tocó en suerte. Aunque malo, podría haber sido peor… Todavía recuerdo cuando me contaron que iba a ser tío… se me caían las lágrimas. Después vino Ivito y ahora la completamos con Luquita. Disfruten de las barbaridades que dicen y hagan sus comentarios,
Tony